Soy Cristian Llorca. Mi pasión por la tecnología comenzó en la década de los 90, en un lugar poco convencional: la chatarrería del padre de un amigo.
Allí, entre piezas sueltas y tornillos, desmontábamos televisores, lavadoras, radiocasetes, VHS y cualquier aparato electrónico que llegase a nuestras manos.
Desde pequeño, sentí una profunda curiosidad por entender las entrañas de esos dispositivos que parecían tan complejos.

Con los años, transformé esa curiosidad en mi profesión.
Me formé en el campo de la tecnología y las reparaciones, y hoy sigo en constante aprendizaje.
Me esfuerzo por estar a la vanguardia, aprendiendo de los mejores profesionales del mundo, lo que me ha permitido especializarme en áreas como la microsoldadura.

Mi misión es clara: contribuir a un mundo más sostenible, reparando y dando una segunda vida a tus dispositivos. Para mí, cada reparación es una oportunidad de cuidar el planeta y demostrar que la tecnología puede ser parte de la solución.